Actualmente, adquirir una casa es un desafío, ya que los precios siguen en aumento y los créditos hipotecarios son muy limitados. Comprar una vivienda con ahorros se ha vuelto casi imposible, pues apenas alcanzan para subsistir.
No obstante, tres niños de Australia lograron reunir sus ahorros y adquirieron una casa valorada en más de medio millón de dólares. Este sorprendente caso salió a la luz a través de una entrevista en 7 News, un medio local de Melbourne.
Guiados por su padre, Cam McLellan, un profesional en bienes raíces y cofundador de OpenCorp, Ruby, una niña de seis años, junto a sus hermanos Gus y Lucy, juntaron sus ahorros para adquirir una vivienda en una área rural situada a 48 km al sureste del centro de Melbourne, Australia.
La casa tuvo un precio de 671 mil dólares, que se irá pagando de manera mensual por varios años. Cada niño aportó dos mil dólares que lograron reunir realizando quehaceres del hogar y ayudando a su padre a empaquetar envíos de su libro titulado «Mi inversor inmobiliario de cuatro años», que está a la venta en línea y busca transmitir sus consejos a sus hijos y otros interesados.
Como padre, si me sucede algo, lo único que puedo ofrecer es mi conocimiento sobre inversiones. Este libro está diseñado para que mis hijos lo utilicen cuando sean lo suficientemente mayores, así que he delineado todos los pasos necesarios para construir una cartera de propiedades.
McLellan comenzó a invertir en bienes raíces a los 20 años, con el objetivo de generar ingresos pasivos y dejar de trabajar. Tras alcanzar 250,000 dólares en ganancias netas por alquiler de sus propiedades, decidió retirarse anticipadamente.
El precio de la vivienda ya ha aumentado en 70,000 dólares, lo que indica que ha sido una buena inversión hasta ahora. El padre estima que el valor de la propiedad de sus hijos superará un millón de dólares en los próximos diez años, por lo que planean venderla en el futuro y repartir las ganancias de manera equitativa.
Australia está en medio de un auge inmobiliario, ya que en ciudades como Melbourne, los precios de las casas aumentaron un 19.5 por ciento el año pasado. El precio promedio de una vivienda en la actualidad es de 953,000 dólares, lo que llevó al padre de estos niños a asesorarlos para invertir en un bien que podría duplicar su valor.
El Commonwealth Bank de Australia reveló que una cuarta parte de los australianos ha optado por agruparse con familiares o amigos para comprar una vivienda. Se espera que el mercado inmobiliario del país se desacelere en 2022 y experimente una caída de al menos dos dígitos en 2023, ya que los bancos están aumentando sus tasas hipotecarias fijas desde los niveles históricamente bajos del 2 por ciento.
