Algunos argumentan que el mayor reto de tener un esposo es que impide tener un novio (¡qué mal!). Si este es tu dilema, puedes informarle a tu pareja que la ciencia sugiere que las mujeres deberían considerar tener uno o dos esposos adicionales por si acaso.
La monogamia es un modelo relacional que restringe el afecto y la intimidad a una sola pareja, siendo el estilo de vida más extendido entre muchas personas en el mundo. Sin embargo, estudios indican que la poligamia podría ofrecer más beneficios.
Las mujeres deberíamos tener más de una pareja
Los antropólogos evolutivos Monique Borgerhoff Mulder y Cody T. Ross llevaron a cabo un estudio sobre los sistemas de emparejamiento humano, que se caracterizan por asociaciones a largo plazo y difieren de los sistemas de apareamiento en la mayoría de los animales. En otras palabras, los humanos tienden hacia la monogamia, mientras que los animales favorecen la poligamia.
De acuerdo con el artículo «Desentrañando el éxito de apareamiento y probando los principios de Bateman en una población humana», en los Homo sapiens sapiens, son los hombres quienes suelen tener varias parejas a la vez, mientras que las mujeres se limitan a una.
No obstante, el beneficio de la poligamia se observa cuando son las mujeres las que tienen múltiples novios o esposos, y no al revés. ¡Punto a nuestro favor!
¡La ciencia ha hablado!
La investigación original se centra en el reino animal, pero Mulder y Ross aplicaron las conclusiones del genetista Angus John Bateman a los humanos, estudiando durante dos décadas a 2,000 pimbwes, un grupo étnico de una remota localidad en el este de África.
Se descubrió que tanto hombres como mujeres tenían más hijos cuanto más tiempo llevaban casados. Sin embargo, al analizar el número de parejas, el patrón variaba. Los hombres con más esposas tenían menos hijos que aquellos con menos. A la inversa, las mujeres con más esposos tenían más hijos que las que tenían menos.
Adicionalmente, tener múltiples cónyuges brinda a la mujer una fuente extra de ingresos y le ayuda a evitar problemas si uno de ellos enferma, ya que otro puede cubrirlo en el trabajo, lo que resulta altamente beneficioso en comunidades que aún realizan actividades de caza, pesca y agricultura.