Reservar un hotel o un Airbnb puede parecer una ruleta rusa, ya que nunca sabes con certeza qué esperar: podrías llegar a una mansión o enfrentarte a un lugar horrible. Además, las fotos pueden estar editadas o ser muy antiguas.
Desafortunadamente, la tiktoker Phoenruber vivió una mala experiencia al ser engañada. Ella pensó que al llegar a su alojamiento, encontraría una casa pequeña y encantadora, pero al llegar se dio cuenta de que era un lugar desordenado y con espacios muy pequeños. Grabó su experiencia y concluyó que el lugar parecía más la casa de un acumulador que cualquier otra cosa.
Phoenruber reservó una casa que parecía de ensueño
En su video, la usuaria de TikTok comentó que había rentado una casa vintage por diez semanas, que en las fotos se veía bastante acogedora. Aunque sabía que no sería un lugar lujoso, ya que tenía experiencia con estancias en lugares antiguos, no estaba preocupada.
Mostró las fotos del lugar
La chica compartió las fotos para que sus seguidores tuvieran una idea de cómo lucía el alojamiento al solicitarlo. Había muebles clásicos, bonitos y coloridos sofás, un tapiz antiguo y hasta un gran jardín.
Una vez que llegó a la casa, quedó totalmente sorprendida
La realidad era completamente distinta: había cajas por todos lados, el aire acondicionado y la ducha no funcionaban, y el dueño ni siquiera se tomó la molestia de entregarle las llaves.
Lo extraño es que tenía muy buenas reseñas
La chica confesó que, al ver el anuncio, pensó que había pocas fotos, pero confió en las reseñas, ya que todas eran de cinco estrellas.
Todos le sugirieron pedir un reembolso
Lo más triste de la situación es que ella sufre de ansiedad social y siempre busca complacer a los demás, así que no se atrevió a pedir un reembolso y decidió quedarse, aunque no por mucho tiempo.
Se comunicó con Airbnb, pero no recibió respuesta inmediata, así que tuvo que permanecer en el lugar durante 11 noches sin solución, pagando el precio completo; le cobraron una tarifa normal. Inicialmente, el precio era de 2032 dólares por 70 noches, pero al quedarse solo 11, tuvo que abonar 1195 dólares.
Al final, pagó más de lo que debió, pero dejó esta experiencia como lección para que otros no acepten alojamientos en malas condiciones, aunque parezcan “económicos”.