En los últimos años, Paris Hilton ha sido clara y sincera sobre su postura respecto a las cirugías plásticas y modificaciones estéticas como el bótox, afirmando sin reservas que nunca se ha sometido a esos procedimientos.
La conocida heredera, quien celebró su cumpleaños número 40 en febrero, indicó que jamás ha sentido curiosidad o interés por los métodos quirúrgicos para mejorar su aspecto, subrayando que su belleza es completamente natural.
Nunca me he inyectado, ni bótox ni rellenos. Muchos de mis amigos han optado por esos tratamientos desde hace años, incluso desde sus veintes, pero estoy muy feliz de no haber tomado esa decisión.
A pesar de ello, la estrella de Life Of Paris comentó que es aficionada a un dispositivo de microcorrientes llamado NeurotriS, el cual le ayuda a mantener la firmeza de su rostro. Además, su esteticista de confianza, Heather Nicole, afirmó que esa máquina contribuye a retrasar los efectos de la edad y las manchas solares.
Hilton añadió que su rutina de cuidado de la piel ha mejorado y evolucionado con el tiempo. Anteriormente, no le daba importancia y prioritizaba salir de fiesta, pero ahora se dedica más a cuidar de su imagen, tanto interna como externamente.
Me siento muy orgullosa de ser completamente natural y de no haberme hecho nada. Estoy feliz conmigo misma, aunque no juzgo a los demás. Cada quien debería hacer lo que más les haga felices. A mí, en lo personal, no es algo que me interese.
No es la primera vez que la famosa heredera desmiente el uso de cirugías o bótox. En 2016, aseguró que su cambio de estilo de vida la ha ayudado a mejorar y mantener su apariencia. A pesar de estar bajo el escrutinio público, la protagonista de The Simple Life sabe lo que es ser un ícono.
La gente me llama ícono y antes solía aceptar eso como un cumplido, pero nunca me he sentido cómoda describiéndome así. Me hace feliz ser una inspiración para otros. Valoro el empoderamiento femenino y el hecho de que las mujeres seamos valientes e independientes. Es lindo ver a otras mujeres logrando cosas por sí mismas en lugar de depender de un hombre.