Jaimie y Dave son una pareja estadounidense que tomó una decisión poco convencional, pero que les ha permitido vivir sin hipotecas: construyeron su propia casa utilizando dos grandes contenedores de transporte; uno de 6 metros y otro de 12. Aunque podría parecer que un lugar así tendría un diseño muy reducido, está equipado con todas las comodidades necesarias.
Estos contenedores son comúnmente empleados para el transporte de mercancías, lo que hace que pocos los consideren como opción para edificar una vivienda… o al menos, eso pensábamos. Tras 10 meses de esfuerzo y dedicación, Jaimie y Dave transformaron estas estructuras en un cálido hogar. En su interior, presentan sorprendentes características que te harían dudar de que se trate de una casa convencional.
Por supuesto, no todo fue sencillo; el mayor reto ocurrió cuando Dave sufrió una hemorragia cerebral, lo que obligó a la pareja a pausar el proyecto mientras él se recuperaba. Afortunadamente, tras su recuperación, el proyecto continuó y para él resultó ser la rehabilitación perfecta. ¡Mira las fotos del impresionante resultado!