domingo, mayo 4, 2025

Pareja celebra una boda de ensueño con un presupuesto limitado.

Muchas chicas sueñan con una boda perfecta: un día soleado, un vestido de ensueño y la compañía de muchos invitados para celebrar uno de los momentos más felices de sus vidas. No obstante, la dura realidad que enfrentan muchas parejas es que organizar una fiesta de matrimonio no resulta nada económica.

¡Pero no hay que perder la esperanza! La boda de tus sueños puede ser posible. Una pareja de Perth, Australia, logró llevar a cabo una ceremonia hermosa con un presupuesto bastante limitado. ¡El vestido costó solo 25 dólares!

Pospusieron su boda tres veces

Alexa Witney y su ahora esposo Kyle Bindon se comprometieron justo antes de que comenzara la crisis sanitaria que ha afectado al mundo durante casi dos años. Debido a las medidas de protección, se vieron obligados a reprogramar la fecha de la ceremonia en tres ocasiones.

Adicionalmente, la familia de Alexa vive en Canadá, por lo que la pareja intentó encontrar una fecha que les permitiera asistir. Lamentablemente, esto no fue posible. Sin embargo, esto les permitió realizar una boda muy pequeña, lo que redujo considerablemente los gastos.

Muchas cosas fueron gratis

Dado que la boda se convirtió en un evento más íntimo, decidieron que no gastarían más de 1500 dólares en total. Así, Alexa pudo evitar un gran gasto en el vestido, ya que tuvo la suerte de encontrar uno perfecto para ella en Facebook, que solo le costó 25 dólares, y el velo se lo prestó una de sus amigas cercanas.

Además, resultaron ser muy afortunados, ya que a través de un sorteo en Instagram ganaron una sesión de fotos gratuita, junto con las flores y el maquillaje de Alexa. Pero eso no es todo, pues una de sus amigas se ofreció a peinarla, sin cobrarle nada. Todo esto permitió que el presupuesto se redujera a solo 1000 dólares.

Su boda fue hermosa y económica

Como escenario para su unión, eligieron la pintoresca iglesia Jarrahdale y solo tuvieron cinco invitados. Además, para su luna de miel, alquilaron una caravana, llevaron a sus dos perros, Honey y Mu, y se fueron una semana a la ciudad costera de Esperance, conocida por sus impresionantes paisajes.

Queríamos gastar lo menos posible, ya que nuestra boda se pospuso tantas veces. Tanto mi esposo como yo consideramos que muchos de los elementos desechables de las bodas no son necesarios y deseamos organizar una celebración pequeña cuando mi familia pueda venir desde Canadá, así que no podíamos permitirnos gastar mucho en esta boda.

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