El amor de un padre es tan inmenso que no conoce límites. Un claro ejemplo de ello es Luis Felipe Soares, de 47 años, quien decidió inscribirse junto a su hijo Lucas en la facultad de Derecho para apoyarlo en la culminación de sus estudios.
Lucas padece síndrome de Asperger, y debido a esto, fue víctima de acoso escolar. Para combatir esta situación, Luis optó por acompañar a su hijo en la universidad, una acción que recibió muchos elogios en redes sociales.
Luis es técnico industrial y vive con su pareja y su único hijo, Lucas Weberling, quien fue diagnosticado con Asperger a los 12 años y sufrió acoso escolar durante gran parte de su trayectoria educativa.
Lucas había decidido no finalizar sus estudios para evitar esa dolorosa experiencia, pero su padre lo animó a perseguir sus sueños y lo acompañó a lo largo de su vida universitaria. Ambos se matricularon en la escuela de Derecho, estudiaron y realizaron tareas juntos, una decisión que fortaleció su vínculo.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando Lucas compartió con su clase que tenía Asperger, y su padre estaba presente para apoyarlo como el verdadero héroe que es.
Tras años de dedicación y esfuerzo, padre e hijo lograron completar sus estudios, alcanzando una meta que evidencia que el amor paterno no conoce límites.
El primer día de clases, estaba nervioso y ansioso por conocer cómo sería la experiencia y cómo manejarla. Todo era completamente nuevo para todos. Al principio fue bastante complicado. (…) No existen barreras que una persona autista no pueda superar. Si cuentan con apoyo y alguien que confíe en ellos, pueden cambiar el mundo. Creo que eso es lo que este mundo necesita: más personas como nosotros. Personas que crean en los demás, que les hagan sentir que, a pesar de la grandeza del mundo, se vuelve pequeño por la cantidad de gente dispuesta a ayudarles a lo largo de la vida. Si tienes eso, realmente puedes lograr cualquier cosa.
Luis