Aún estamos atravesando momentos complicados y es crucial que sigamos cuidándonos. No obstante, hacer una simple llamada de cortesía no nos quita valentía, ¿cierto? Eso es lo que esta chica anhelaba de sus amigos.
Christian Zamora compartió un video en TikTok, donde relató que su novia, Maryann, dedicó mucho esfuerzo a organizar una cena de Acción de Gracias para todos sus amigos, pero nadie apareció ni se tomó el tiempo de enviar un mensaje o hacer una llamada para disculparse.
Maryann planeó el evento durante dos semanas, decoró su sótano y preparó una cena especial para agradecer que tanto ella como sus amigos estaban sanos y habían superado el covid-19. Además, quería empezar la temporada navideña con un sentido de unión, pero sus amigos no compartieron esa intención, ya que la dejaron plantada.
Según Christian, nadie tuvo el valor de enviar un mensaje o hacer una llamada para disculparse. Ella esperaba que alguien llegara y disfrutara de lo que había preparado, pero al final, terminó llorando desconsoladamente.
Mi novia estaba muy emocionada por su primer Día de Acción de Gracias, pero nadie apareció. Decoró todo el sótano y preparó mucha comida.
En el video, Christian mostró la habitación, donde había una gran mesa repleta de comida y los cubiertos intactos. También se podía ver a Maryann sentada sola, luchando por contener las lágrimas.
Me siento tan triste por ella. Estoy intentando animarla, pero no he tenido éxito.
En otro clip, reveló que los amigos de Maryann habían confirmado su asistencia, pero el día del evento simplemente dejaron de contestar los mensajes.
Mi chica y sus amigas decidieron organizar un Día de Acción de Amigos con dos semanas de anticipación, ¡lo planearon dos semanas!
Todo estaba preparado: la fecha, la hora y la comida. Todos iban a asistir, pero cuando llegó el día, nadie respondió en el chat grupal. Ninguna persona enviaba mensajes o llamaba, pero en su mente, ella pensaba que podrían llegar tarde. Tras tres horas, aceptó que nadie vendría.
Por suerte, su novio invitó a sus amigos para llenar los asientos vacíos en la mesa. Ellos fueron amables y algunos incluso llevaron postres o bebidas para celebrarlo con ella. Al final, el día tuvo un final feliz, pero esta historia nos deja una lección importante: Si no deseas asistir a un evento, no ilusiones a nadie y, si al final surge un imprevisto, lo más cortés es hacer una llamada o enviar un mensaje. Así, la otra persona no se sentirá decepcionada por tus acciones.
Por cierto, Maryann ya no es amiga de esas chicas y está formando nuevas amistades.
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