Las bodas son celebraciones repletas de amor y alegría, donde se rinde homenaje al cariño y respeto entre dos personas. Cada boda, sin excepción, es perfecta cuando se celebra entre individuos que realmente se aman. En ocasiones, ese amor se eleva a nuevos niveles, generando historias en internet que hacen brotar nuestra niña romántica interior.
La esposa del atleta paralímpico Anthony Ferraro, Kelly Anne Ferraro, tuvo el gesto más dulce que demuestra el inmenso amor existente entre ambos al elegir un vestido de novia texturizado para que Anthony, quien es ciego, pudiera sentir la belleza de su atuendo nupcial el pasado 2 de octubre.
Él sintió cómo se veía
Para que Anthony pudiera experimentar la sensación de “verla” en su hermoso vestido de novia, Kelly Anne decidió sorprenderlo eligiendo un vestido táctil con bordados de flores texturizadas de algodón y encaje.
Dijo que [Kelly Anne] es como mis ojos en el mundo, pero que haya mandado a hacer un vestido específicamente para que yo pudiera sentirlo y tocarlo significó todo para mí. La pude sentir. Pude sentir que se veía hermosa.
Sensaciones inolvidables
Kelly Anne tomó como inspiración este vestido tan especial de la prenda que usó en su primera cita con Anthony. A su vez, no es la primera vez que Kelly Anne adapta sus atuendos para satisfacer las necesidades de Anthony. En la premier del documental A Shot in the Dark, que relata la vida de Anthony como atleta ciego, Kelly Anne eligió un vestido de terciopelo que podría ser percibido por él. Al planear todos los detalles de su vestido, adquirido en la boutique Loulette Bride en Brooklyn, supo de inmediato que quería usar telas agradables al tacto.
[El vestido] tenía una franja de terciopelo alrededor, junto a detalles de encaje. Flores elaboradas con algodón suave. Incluso la parte posterior del vestido contaba con textura. Para añadir más sorpresa, me obsequió una impresionante chaqueta hecha a medida que se puso más tarde, con flecos colgando de los brazos. Me recordó a nuestra primera cita.
“Ella parecía un ángel”
Es difícil que un gesto como este, que refleja tanto amor, no nos conmueva por completo. Si así es para nosotras, imagina cómo se sintió Anthony.
Cuando llegó a mí, puso mis manos en su vestido. Estaba completamente asombrado y comencé a llorar. Las sensaciones táctiles son muy significativas para mí, crean una imagen de cómo se ve alguien en mi mente. Kelly parecía un ángel.