La cuarentena ha ocasionado que muchas personas pierdan sus trabajos o que sus sueldos se vean reducidos; sin ese soporte económico, miles de familias atraviesan momentos difíciles y buscan formas de salir adelante.
En naciones como Malasia, el desempleo sigue en aumento, por lo que las familias deben ingeniárselas para llevar comida a la mesa. Este es el caso de cuatro niños originarios de Setapak, quienes no dudaron en contribuir a los gastos del hogar vendiendo fideos en las calles, después de que sus padres fueran despedidos recientemente.
Apoyan como pueden
La página Love n’ Care fue la primera en divulgar su historia al verlos sentados fuera de un edificio con sus canastas. Además, mientras ofrecen sus productos, también leen sus libros escolares y realizan sus tareas, demostrando que valoran mucho la educación.
Tocaron el corazón de los transeúntes
Lo que más sorprendió a las personas es que estaban solos y sin ningún tipo de protección que los resguardara del sol o la lluvia. Por ello, muchos criticaron la irresponsabilidad de los padres al dejarlos desatendidos en la vía pública, a pesar de que fue decisión de los pequeños, quienes mostraron gran determinación en ayudar tras la grave situación familiar.
Muchos no estuvieron de acuerdo
Aplaudimos enormemente el esfuerzo que estos pequeños tienen por superarse y apoyar a sus padres.
