En diversas localidades, es habitual observar a personas solitarias en busca de compañía, ya sea en un parque, en un café o en un restaurante. Afortunadamente, siempre hay alguien dispuesto a entablar una buena conversación con ellas.
Este es el caso de la historia detrás de la imagen de un joven sentado con Jan, una anciana en un restaurante. Después de ser rechazada por un grupo de hombres, Jan se acercó al muchacho y le preguntó si podía sentarse en su mesa para compartir la comida. El joven aceptó y parecían amigos de toda la vida.
Amanda Marquell Craft es una joven que compartió en Facebook que Jan se encontraba en un McDonald’s en Noblesville, Estados Unidos, y solo buscaba compañía. Se acercó a un grupo de adolescentes y, tras preguntar sobre el peinado de uno de ellos, fue a buscar servilletas. Cuando volvió, los chicos ya se habían ido.
Uno de los adolescentes llevaba un moño de hombre, lo que intrigó a Jan, quien le preguntó qué lo había llevado a elegir ese peinado. No obstante, ellos no lo tomaron muy bien; supongo que se asustaron.
– Eric Haralson
Jan pensó que quizás había sido demasiado atrevida, pero solo deseaba un poco de compañía, así que se fijó en un joven solitario en una de las mesas y le preguntó si podía unirse a él. Eric, el joven, respondió: “por favor, hazlo”.
Así comenzaron a platicar cómodamente mientras disfrutaban de su comida. Aparentaban ser amigos de toda la vida, y al ver el emotivo momento, Amanda, quien estaba en el lugar, decidió tomarles una fotografía y compartir la historia en Facebook.
“Ella va a la iglesia todos los domingos, hablamos mucho sobre eso. Yo le conté sobre mi novia y mis hijos, pero ella no mencionó que tuviera hijos ni pareja.”
– Eric Haralson
La imagen del joven sonriendo frente a la mujer conmovió a todos en la red social, volviéndose viral rápidamente. Además, empezaron a llegar mensajes de felicitación al joven por permitir que la señora se sentara junto a él y así tuviera una buena experiencia.
En una entrevista para un medio local, Eric comentó que disfrutó mucho su conversación con la anciana y que se llevaron muy bien a pesar de ser completos desconocidos.
Ambos compartieron aproximadamente 45 minutos de comida, durante los cuales hablaron de todo, desde el deseo de Jan de pintar su auto hasta temas espirituales.
“Nunca mencionó si vivía con alguien, solo habló de alguien llamado John Boy. Ella vive cerca del McDonald’s y había tenido una obsesión con los Caramel Frappes hasta que se enfermó. Ahora, cuando viene, generalmente pide una ensalada de pollo a la parrilla, que fue lo que tomó esa mañana.”
– Eric Haralson
Al finalizar su comida, Eric la acompañó a su auto, donde intercambiaron números para mantenerse en contacto. Él intentó comunicarse con ella tras volverse viral la publicación de Amanda, pero su llamada fue directa al buzón de voz. Sin embargo, el joven está decidido a contactarla para seguir viéndose.
“Seguiré intentándolo; sé que si tuviéramos una eternidad, tendría una historia que contarme cada día.”
– Eric Haralson
La historia no terminó ahí. Inspirados por lo ocurrido, los propietarios de esa sucursal de McDonald’s decidieron instalar una nueva mesa comunitaria en honor a Jan y Eric.
Mesa comunitaria
Todos somos una comunidad. Por eso dedicamos esta mesa para disfrutar de una comida con un amigo, viejo o nuevo.
En honor a Jan y Eric.
Tras la instalación de esta mesa, se implementaron mesas comunitarias en las 14 sucursales de la franquicia, con la finalidad de inspirar a otros clientes a entablar conversaciones entre ellos.
Es común que las personas mayores se sientan solas la mayor parte del tiempo, pero esta vez no fue así gracias a la amabilidad de este chico, quien sin duda hace del mundo un lugar mejor.