Acoger a una mascota es un gesto de generosidad. No obstante, las organizaciones dedicadas a la adopción de animales suelen tener lineamientos rigurosos, hasta el punto de que pueden denegar una adopción sin posibilidad de reconsideración.
Este fue el caso de una joven a quien se le impidió adoptar un perrito debido a que no contaba con una vivienda propia. En lugar de rendirse, decidió caminar por las calles de su ciudad en busca de un perro sin hogar que pudiera formar parte de su vida, ya que su mayor anhelo era tener un compañero fiel. Su experiencia fue documentada en fotografías y compartida en redes sociales.
La adopción de un perro implica una gran responsabilidad, ya que estos requieren atención, tiempo, amor y una dieta adecuada. Por ello, las organizaciones que promueven la adopción exigen ciertos requisitos para asegurar su bienestar, ya que no desean que una vez más terminen en la calle.
Lamentablemente, una joven que deseaba adoptar un perrito no pudo cumplir con todos estos requisitos, debido a que carecía de una vivienda propia. A pesar de esto, no se desanimó y decidió explorar las calles de su ciudad natal, Quito, Ecuador, en búsqueda de un perrito al que pudiera ofrecerle un nuevo hogar.
Su aventura fue capturada en varias fotografías, las cuales fueron difundidas por la organización Salvando Lanitas, volviéndose viral y animando a otros a seguir su ejemplo.
La adopción no salió como esperaba
Por fortuna, tenía un plan B
Elegir el perrito ideal no fue fácil
Convencerlo para ir a casa fue complicado
Llevarlo a la fuerza tampoco fue efectivo
Todos los perritos huían, sin entender lo que sucedía
Hasta que uno de ellos comprendió la situación
Finalmente, tenía al perrito que tanto deseaba
Y ahora era responsable de su salud
Ahora es el más querido de la familia
Y juntos viven una hermosa historia
