Desde noviembre de 2019, la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) abrió una carpeta de investigación contra el abogado Víctor Álvarez Puga y su esposa, la presentadora de televisión Inés Gómez Mont, por su participación en delitos de delincuencia organizada y malversación de fondos durante el sexenio del expresidente de México, Enrique Peña Nieto.
Por esta razón, desaparecieron junto a sus siete hijos hace varios meses y son considerados prófugos de la justicia, ya que podrían enfrentar hasta 20 años de prisión por haber recibido más de 14 millones de pesos mexicanos, equivalentes a unos 696,304 dólares, de empresas fantasmas. Sin embargo, se ha dado a conocer que la conductora regresó de Estados Unidos y se informa que está tratando de negociar con las autoridades para evitar la prisión.
Según información presentada por Animal Político, medio que accedió a la carpeta de investigación de la conductora, se ha comprobado que intentó negociar su libertad con la Fiscalía General de la República ofreciendo poco más de 14 millones de pesos mexicanos, casi 700 mil dólares, cantidad que supuestamente recibió de la red de compañías fantasmas.
Sin embargo, el juez federal se negó a aceptar la propuesta que Inés Gómez Mont presentó para reparar los supuestos delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero, dado que esa cantidad representa menos del uno por ciento de los más de 2500 millones de pesos, es decir, más de 124 millones de dólares, que supuestamente desviaron de las empresas fantasmas Tangamanga y Gupea.
Antes de que en 2021 el juez federal Iván Aarón Zeferín Hernández emitiera la orden de aprehensión contra la pareja, se filtró información de que la conductora y su esposo amasaron su fortuna a través del desvío de casi tres mil millones de pesos, casi 150 millones de dólares, originalmente destinados a que la Secretaría de Gobernación (SEGOB) reforzara la seguridad en los penales federales.
Ante esta filtración, el juez encargado del caso denunció personalmente el incidente y ordenó una investigación inmediata. Los resultados revelaron una extensa documentación que explicaba cómo, mediante cientos de transferencias y depósitos, todos los recursos de la SEGOB fueron desviados a las compañías Rancel S.A de C.V, Modemo S.A de C.V, Comcelint S.A de C.V, Tecnología e Innovación Arrimplo S.A de C.V, Gupea Construcciones S.A de C.V e Ingeniería y Arquitectura Tangamanga S.A de C.V, que parecen ser empresas fantasmas.
Dinero que poco después fue transferido por dichas compañías a más de 100 personas físicas y morales, incluyendo a la reconocida presentadora mexicana Inés Gómez Mont, quien recibió fondos de la constructora Gupea, así como de Ingeniería Tangamanga, aceptando 15 retiros a su nombre en la primera compañía por 7 millones 448 mil 816 pesos, es decir, un poco más de 370 mil dólares, y 12 retiros en la segunda por 7 millones 395 mil pesos, es decir, 367,795 dólares.
Por el momento, esto es lo que se sabe sobre las negociaciones que Inés Gómez Mont ha intentado llevar a cabo con las autoridades; a pesar de que se le ha negado la oportunidad, tanto la conductora como su esposo siguen enfrentando cargos ante la ley.