Las adicciones son devastadoras, pero solo los valientes logran escapar de ese cruel mundo. Uno de ellos es Kenny Dunn. Con una amplia sonrisa, un cuerpo atlético y una vida más saludable, es cómo se ve este joven en la actualidad, aunque hace una década solo era una sombra de lo que es ahora.
A pesar de las dificultades, Kenny ha trabajado incansablemente para mantenerse sobrio y este noviembre celebrará sus primeros cinco años en esta nueva vida. A través de diversas fotografías, ha documentado su transformación, y el cambio es realmente asombroso.
Así se veía Kenny Dunn un día después de iniciar su sobriedad
En 2016, se encontraba en el punto más bajo de su adicción, consumiendo entre 12 y 14 bebidas alcohólicas diarias y perdiendo el conocimiento de tres a cuatro veces por semana. Afortunadamente, decidió darle un giro a su vida con la ayuda de la meditación, la concentración y la disciplina. Así, buscó inspirar a otros compartiendo su progreso en las redes sociales.
He decidido que mis imágenes anuales y mi progreso ya no son solo un reflejo de mi recuperación, sino una invitación a compartir un mensaje de esperanza con adictos de todo el mundo.
Después de 30 días, el cambio ya era evidente
La mayor diferencia entre el hombre que fui hace cinco años y el que soy hoy es mi actitud. Me despierto cada día emocionado por lo que el futuro trae. Incluso en las partes más ordinarias de mi vida, puedo encontrar satisfacción en lo que hago; ese es el verdadero regalo que he recibido.
Las reuniones de 12 pasos fueron fundamentales
No solo las reuniones de 12 pasos ayudaron a Kenny, también mejoró su alimentación y eliminó los carbohidratos de su dieta.
El ejercicio fue clave para su recuperación
Solía ser un hombre que solo podía hacer una flexión y ni hablar de una dominada. En octubre de 2020, acumulé 1500 flexiones. Recuerdo que cuando logré hacer cinco flexiones seguidas, pensé que era un milagro. Sin duda, nunca podría haberlo hecho sin el ejercicio.
Él asegura que es de valientes pedir ayuda
Para Kenny, pedir ayuda no es una señal de debilidad; por eso siempre está a la par de aquellos que buscan apoyo.
Si crees que estás en tu punto más bajo y no puedes más con la adicción, habla con alguien en quien confíes. Un amigo, un familiar, un compañero de trabajo, cualquiera.
Desde mi experiencia, acercarse a otras personas es la mejor manera de recuperarte. Intenté detenerme por mi cuenta, pero fue solo una lección de ineficacia. Si no sabes a quién contactar, puedes enviarme un mensaje en Twitter o Instagram.
Dos años después de su sobriedad, era feliz
Y su sonrisa brillaba cada día, porque finalmente vislumbraba una luz al final del túnel. Sin embargo, aún sigue luchando contra las adicciones para no caer de nuevo.
No podría haber estado en la mejor forma de mi vida a los 38 años si no hubiera sido constante y dedicado.
Ahora su mejor trabajo es hacer ejercicio
Kenny solía hacer ejercicio tres o cuatro veces a la semana, pero aumentó a cinco, ya que su cuerpo comenzó a adquirir más agilidad y habilidades.
Puede que parezca mucho, pero nunca se comparará con el tiempo que perdí bebiendo en el sofá. Ciertamente, no consume tanto tiempo como mirar televisión y beber.
Este último año ha sido difícil, pero sigue trabajando
El último año y medio ha sido una auténtica pesadilla para adictos y sus familias. Cuando las reuniones se suspendieron debido a la pandemia, fue complicado conectarse con los recién llegados. Los chicos con los que trabajo han sido increíbles en su esfuerzo por mantenerse sobrios. Cualquiera que haya logrado mantenerse limpio durante este tiempo es un verdadero milagro.
Su transformación es evidente y luce mejor que nunca
Así era Kenny antes y así es como se ve cinco años después, luchando y cada vez más feliz.