El año pasado, un derrame de petróleo en la laguna de Puerto Asís, en Putumayo, Colombia, provocó un grave impacto en la zona y generó un intenso debate sobre las medidas ecológicas previamente implementadas en estos casos.
Para contribuir a la reparación del daño, el ingeniero de petróleos Duvanis Herazo Navajas se dedicó a desarrollar una alternativa al uso de productos químicos importados que comúnmente se utilizan para limpiar la contaminación en las aguas tras derrames de hidrocarburos.
Se trata de una mezcla de surfactantes extraídos de plantas como la quinoa y el coco, que al entrar en contacto con el petróleo, facilitan su descomposición en estructuras más simples, las cuales son degradadas por las bacterias nativas del medioambiente.
Navajas ya ha aplicado su invento en diversos derrames de petróleo en Colombia, como en el río Amazonas, donde el fondo del río logró recuperarse en cuestión de semanas, y en zonas de aguas frías que el emulsificante limpiaba efectivamente.
Este notable invento ha colaborado en diversas áreas de Latinoamérica. Sin embargo, se espera que su uso no sea necesario, dado que lo más importante es prevenir este tipo de desastres ecológicos que suelen devastar ecosistemas completos.
Mientras tanto, esta alternativa ecológica y biodegradable ha demostrado ser una solución viable y sostenible para restaurar ecosistemas, evitando las consecuencias a corto y largo plazo que causan los productos químicos.