Esta historia se remonta a hace 35 años, cuando una mujer de Pittsburgh, Estados Unidos, tuvo que dar en adopción a su hijo debido a la falta de recursos económicos y un hogar adecuado que ofrecerle.
Con el paso de los años, intentó buscarlo, pero el expediente de adopción del pequeño se perdió durante una inundación que devastó hogares, escuelas y hospitales en la comunidad. A pesar de eso, nunca perdió la esperanza y, años más tarde, su sueño se hizo realidad durante un maratón.
El destino los mantuvo separados durante mucho tiempo
Stacey Faix, de Pittsburgh, dio a luz a un bebé cuando tenía solo 15 años, a quien se vio obligada a dar en adopción debido a la falta de recursos para mantenerlo. La decisión fue extremadamente difícil, pero sabía que no podía arrastrar a ese pequeño a una vida llena de adversidades.
Ese bebé fue adoptado y recibió el nombre de Stephen Strawn. Creció en Ohio, Estados Unidos, y se unió a las Fuerzas Armadas de su país. Stacey no lo supo hasta 35 años después, cuando finalmente se reencontraron.
A lo largo de los años, Stacey intentó localizar a su hijo, deseando saber cómo estaba y si había tenido la vida feliz que siempre había querido para él. Sin embargo, no pudo obtener información debido a la pérdida del expediente de adopción durante una gran inundación.
Su reencuentro estuvo colmado de amor
Por otro lado, Stephen también buscó a su madre biológica, pero fue en 2017 cuando encontró una pista al recibir su certificado de nacimiento original, que contenía el nombre de la mujer que tanto deseaba conocer.
En su búsqueda, descubrió que su madre era parte de un grupo de apoyo para veteranos, que iba a participar en un maratón. Vio en este evento la oportunidad perfecta para conocerla, así que se puso en contacto con el presidente de la organización y juntos organizaron una sorpresa inolvidable.
Stephen hizo que le entregaran una tarjeta a su madre, que decía: “Han pasado 13,075 días desde la última vez que me viste. No quería que esperaras un día más.” Mientras ella leía, él apareció por detrás y la sorprendió con un abrazo que conmovió a todos los presentes. Ahora están juntos de nuevo, intentando recuperar el tiempo perdido, sanando sus heridas y creando una nueva historia.
