Las sesiones de fotografía profesional son una maravillosa forma de conmemorar bodas, graduaciones, cumpleaños e incluso el nacimiento de una adorable lechona. Exactamente eso fue lo que hizo Connie Hamilton, propietaria de una encantadora cerdita llamada Dynamite.
Dynamite es la lechona más pequeña de su camada, pero también la más valiente y tierna. Por esto, Connie decidió inmortalizar su dulce esencia en una sesión fotográfica realizada por su amiga Cashlie White. El resultado es una explosión de ternura que te hará suspirar.