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Durante la crisis provocada por el Covid-19, el personal médico y de enfermería a nivel mundial se ha convertido en nuestros verdaderos héroes. Estos salvadores, aunque no lleven capa, se destacan por su gran humanidad, arriesgando sus vidas, extendiendo sus jornadas laborales y esforzándose al máximo para ayudar a quienes han contraído el virus. Su dedicación y agotamiento se reflejan en sus rostros cansados y marcados.
Para protegerse, los profesionales de la salud deben equiparse con mascarillas, guantes y trajes especiales durante jornadas que pueden extenderse hasta 12 horas; este equipamiento a menudo causa irritación, hematomas y marcas visibles en su piel, manifestando el arduo trabajo del cual todos deberíamos sentirnos orgullosos.
A medida que nos quejamos del confinamiento
Ellos se esfuerzan por salvar al mundo
Sus jornadas diarias van de 12 a 18 horas sin descanso
No ven a sus familias y no saben si podrán volver a hacerlo
Capturé esta imagen por dos motivos. Primero, para mostrársela a mi pareja y decirle que había concluido mi turno y regresaba a casa. En segundo lugar, quiero enseñarle esto a mi hija cuando crezca, para contarle sobre este periodo.
—Nicola Sgarbi, médico en el hospital civil de Baggiovara, en Módena, Italia
Se entregan por completo para salvar tantas vidas como sea posible
Y nos enseñan que la mejor forma de ayudar es… Quedándonos en casa
Así es como luce tu rostro tras usar una máscara N95 durante todo el día. No contamos con suficientes recursos. Ayúdanos para que podamos ayudarte.
Por ellos, por nuestras familias, por nuestra salud
¡Mil gracias a todos los héroes de gran corazón!
