La maternidad es una de las etapas más ansiadas por muchas mujeres jóvenes. Sin embargo, no todas sienten lo mismo y esto no tiene nada de malo; al final, decidir ser madre o no es una elección personal.
De acuerdo a un estudio realizado por el psicólogo Satoshi Kanazawa, que trabaja en la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres, se encontró que, a mayor inteligencia en una mujer, menor es su deseo de convertirse en madre, ya que sus objetivos y aspiraciones son diferentes.
No ser madre también es un gran sueño
No es ningún secreto que la mayoría de nosotras crecimos con la idea firme de que, en algún momento, deberíamos convertirnos en madres. Sin embargo, con el tiempo, nuestros deseos como mujeres han evolucionado, y más allá de ser amas de casa y madres ejemplares, han emergido sueños profesionales, laborales y financieros que aspiramos a alcanzar, dejando de lado el deseo de la maternidad.
Mujeres maravillosas en todas partes
Según Satoshi, las mujeres con un coeficiente intelectual elevado tienen un 25% menos de probabilidades de desear tener hijos. Esto puede sorprender a muchos, pues las mujeres que sienten este deseo son a menudo las que han alcanzado estabilidad económica y emocional. Frecuentemente, esto se relaciona con la falta de tiempo para dedicar a un niño. Además, realmente desean disfrutar de sus logros personales de una manera diferente.
Jennifer Aniston y Oprah Winfrey son ejemplos claros de esto; son mujeres extraordinarias que han elegido no ser madres, pero que encuentran inmensa felicidad en lo que hacen y en lo que tienen en sus vidas. La elección de no tener hijos no es negativa; simplemente refleja que existen diversas perspectivas sobre este asunto, y todas son igualmente respetables.
