Que algunas personas prefiramos el frío en lugar del calor no implica que nos guste helarnos, simplemente indica que valoramos la calidez de las prendas acogedoras, casi tan reconfortantes como un abrazo.
Los japoneses comprenden a la perfección esta sensación, de ahí surgió el kigurumi, un tipo de mameluco que no solo es cálido, ¡sino también divertido! La palabra proviene de «kiru», que significa “vestir”, y «nuigurumi», que se traduce como “animal de juguete caracterizado”.