A medida que se aproxima el estreno del live action de Mulan, la ausencia de Mushu, Cri-Kee y Li Shang sigue siendo difícil de aceptar. ¡Deshonor!
La falta del General ha generado una gran indignación entre los fans, no solo por la nostalgia que siente el público ante este lanzamiento, sino porque Li es visto como un ícono de la comunidad LGBT+ (ya que Disney lo hizo bisexual accidentalmente), lo que hace imperdonable su omisión.
La razón detrás de la decisión
Ante la inconformidad provocada por esta decisión, el productor Jason Reed se pronunció para dar una explicación que intentara mitigar la controversia:
Decidimos dividir a Li Shang en dos personajes. Uno es el Comandante Tung (Donnie Yen), quien actúa como una figura paternal y mentor a lo largo de la historia. El otro es Honghui (Yoson An), quien se convierte en el equivalente de Mulan dentro del ejército.
La influencia del movimiento #MeToo
Reed añadió que, a raíz del impacto del movimiento #MeToo, consideraron que era inapropiado mostrar la relación romántica entre Mulan y Li, dado que se presentaría una dinámica de poder y control al ser general y soldado. Además, decidieron que el romance no era esencial para que la película cumpliera su propósito.
La relación entre Honghui y Mulan
La relación entre estos dos personajes será similar a la de la versión animada. El productor afirmó que su amistad comenzará de manera conflictiva, pero, a medida que entrenen juntos, surgirá una conexión íntima, ya que ambos podrán reconocer el espíritu guerrero que los define.
A pesar de que Li Shang ocupa un lugar especial en nuestros corazones, para los involucrados era crucial que la producción presentara una versión diferente a la que disfrutamos en nuestra infancia.