Muchos de nosotros hemos imaginado ser princesas y residir en un castillo similar al de las películas de Disney. Bueno, para la familia Hermansons no es factible adquirir un castillo, pero sí han logrado transformar su hogar en un auténtico cuento de hadas.
Así es, la familia se inspiró en films como La Sirenita, Cenicienta y El Rey León, dándole un toque singular y distintivo a su residencia. El resultado es tan impresionante que parece un parque de diversiones privado. Además, la mayoría de las piezas decorativas fueron elaboradas a mano.