Si has teñido tu cabello con mechas, luces o cualquier tipo de decoloración, es probable que hayas notado que este proceso químico deja en tu melena reflejos en tonos naranjas o amarillos.
Cuando esto ocurre, los retoques de tinte suelen ser más comunes, pero hay una solución muy sencilla para evitar ir al estilista cada 10 días y está en tu champú.
¿Qué es el champú púrpura?
El champú morado, violeta o púrpura es ideal para matizar tu tinte y corregir esos molestos reflejos naranjas y amarillentos. Está formulado específicamente para cabellos rubios y decolorados.
Se recomienda usarlo cada seis o siete días ya que no es un champú para lavar el cabello, sino para corregir tonalidades. Además, sus componentes pueden ser algo agresivos y causar resequedad y caspa si se utiliza en exceso.
Arma tu propio champú en casa
Puedes encontrar una amplia variedad de estos champús en salones de belleza o tiendas comerciales, pero si prefieres hacerlo tú misma, prepara papel y pluma y toma nota.
Ingredientes:
- 1 L de champú natural
- 1/4 de tubo color azul (es un tipo de tinte que puedes encontrar en peluquerías y tiendas de productos de belleza)
- 4 cm de tinte 8.11 (este es el tinte que se utiliza para referirse al color rubio claro ceniza)
Procedimiento:
- Coloca en un recipiente el tubo color azul y el tinte 8.11 y mezcla bien ambos productos.
- Vierte la mezcla obtenida en el frasco de champú natural y agita bien para integrar.
- Deja reposar la mezcla durante 72 horas antes de usarla.
Modo de uso:
- Aplica una pequeña cantidad del champú en la palma de tu mano.
- Masajea el cuero cabelludo con el champú.
- Deja actuar durante cinco minutos.
- Enjuaga con agua fría.
- Utiliza el champú solo cada seis o siete días.