El Día Internacional de la Mujer es una fecha que se celebra en numerosas naciones alrededor del mundo, y es importante recordar la lucha que ha tenido lugar durante más de un siglo en favor de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo de las mujeres.
La concepción de un día dedicado a conmemorar a la mujer y su lucha comenzó a gestarse a finales del siglo XIX, en una época donde la industrialización y los avances tecnológicos propiciaron un aumento en la población y en las ideologías, algunas más radicales que otras.
Un poco de historia
La mujer ha luchado por sus derechos durante siglos. En la antigua Grecia, Lisístrata llevó a cabo una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la guerra; durante la Revolución Francesa, las mujeres de París que clamaban “libertad, igualdad y fraternidad” marcharon hacia Versalles para exigir el derecho al sufragio femenino.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, el movimiento obrero mantenía una postura tradicional respecto a la igualdad de la mujer; con el paso del tiempo, los movimientos que defendían los derechos de las mujeres cobraron fuerza: la lucha por el sufragio, la defensa de la igualdad, y la denuncia de la opresión social, familiar y laboral.
Fue en el siglo XX cuando el mundo comenzó a ver a las mujeres como algo más que hijas, esposas o madres. Por ejemplo, en 1909, según una declaración del Partido Socialista, el 28 de febrero se celebró en Estados Unidos el primer Día Nacional de la Mujer. En 1910, en Copenhague, se instituyó el Día Internacional de la Mujer como homenaje al movimiento por los derechos de las mujeres y con el objetivo de alcanzar el sufragio femenino universal.
Tras casi 70 años, las Naciones Unidas proclamaron el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, conmemorando el trágico incendio en una fábrica de camisas en Nueva York, donde más de 140 trabajadoras, en su mayoría jóvenes inmigrantes, perdieron la vida, lo que sentó las bases para la revisión de la legislación laboral en Estados Unidos.
Pero, realmente, ¿de qué se trata este día?
No es un día para felicitar o celebrar lo que se ha alcanzado, sea mucho o poco, ni por el simple hecho «de ser mujer». Es una fecha que pone de manifiesto la desigualdad entre hombres y mujeres que persiste tanto en los países desarrollados como de manera más marcada en los subdesarrollados y en los del Tercer Mundo.
Es un día para reflexionar y actuar sobre la situación de las mujeres a nivel global. Es un momento para recordar a las trabajadoras que lucharon por la igualdad de derechos, y a más de un siglo de inicio de esta lucha, aún sigue siendo necesario erradicar la discriminación, eliminar las conductas machistas, lograr la igualdad salarial, permitir la libre elección, y poner fin a todas las formas de violencia; pero sobre todo, es crucial pensar de manera diferente para no repetir los mismos errores.
Esta fecha recuerda la importancia del respeto a las diferencias y que la igualdad no debe ser considerada una utopía.