Para muchas personas, las mascotas no son simplemente animales de compañía, sino una parte fundamental de su familia, ya que pasan gran parte del tiempo a su lado, compartiendo experiencias, aventuras e incluso creciendo juntos. Por esta razón, perderlas resulta sumamente doloroso, especialmente cuando ocurre a manos de un ser despiadado, como en el caso de la perrita Tita.
La historia de esta querida lomita llegó a los tribunales, alterando la percepción que se tiene sobre los animales domésticos y logrando que un juez en Argentina la reconociera como “hija no humana” de una “familia multiespecie”.
En marzo de 2020, el policía Elías realizaba un recorrido de control sanitario en el balneario Playa Unión de Rawson, en la provincia de Chubut, Argentina, cuando se encontró inesperadamente con una perrita llamada Tita.
Todo parecía estar bien, hasta que el oficial disparó al animal, provocando la muerte instantánea de la lomita y desatando una serie de conflictos, ya que el oficial alegaba que actuó en defensa propia tras un ataque sorpresivo por parte del can. Sin embargo, la familia de Tita sabía que esto no podía ser cierto, dado que ella siempre mostró un comportamiento dócil y gentil.
Tita vivía con Marianella Castillo y Maximiliano Muñoz, una pareja con dos hijos y tres mascotas adicionales. Tras el asesinato de su perrita, ellos exigieron justicia, llevando el caso ante el tribunal. Durante el juicio, el juez Gustavo Daniel Castro declaró culpable al oficial, condenándolo a un año de prisión y a la suspensión de dos años de servicio sin sueldo.
Pero eso no es todo. Por primera vez, ante el tribunal, el juez reconoció a la perrita Tita como “hija no humana” de una “familia multiespecie”, cambiando por completo la perspectiva hacia los animales de compañía y demostrando que también merecen respeto.
Hoy el animal ya no es una cosa, sino un ser sintiente con derecho a que se le respete la vida. Por eso, no podemos afirmar tan livianamente que los intereses y la integridad física de una persona estén por encima del interés de vida de un animal. La muerte de Tita ha causado una pérdida irreparable para su familia. Los testimonios de Castillo y Muñoz mostraron cómo Tita estaba integrada en su vida familiar, convirtiéndose en una familia multiespecie.
– Juez Gustavo Daniel Castro
