Ángel, madre de familia originaria de Estados Unidos, ha dedicado gran parte de su vida a la tienda de artículos deportivos Mitchell Modell. Es una empleada ejemplar: dobla turnos cuando se requiere, no falta, no tiene retardos y se esfuerza al máximo cada día.
Su mayor motivación para dar lo mejor de sí son sus tres hijos y el sueño de tener una casa propia. Este anhelo parecía inalcanzable hasta que un golpe de suerte, derivado de un programa de televisión y la bondad de su jefe, la hicieron merecedora de un cheque que le permitió alcanzar su sueño: tener un hogar. Su historia ya se ha vuelto viral en las redes sociales.
Angel estaba trabajando como cualquier otro día cuando recibió una llamada del Departamento de Recursos Humanos, solicitándole que entrenara a un nuevo empleado, un hombre alto de piel clara y gafas que sería su nuevo compañero. Ella accedió, capacitó al hombre, fue paciente con sus errores y poco a poco le compartió sus preocupaciones sobre no tener una casa propia y digna donde vivir con sus hijos.
Lo que Angel no sabía era que este nuevo compañero de trabajo en realidad era el jefe de la compañía, quien se encontraba encubierto para grabar un programa de televisión estadounidense.
“Hemos estado sin hogar durante mucho tiempo. Ahora vivimos en un refugio. Sin embargo, no importa. No quiero que te sientas triste por mí.”
— Angel
Su jefe quedó conmovido por su historia, su fortaleza y desempeño laboral. Después de una larga jornada y de conocer de cerca a Angel, decidió ayudarla.
Cuando llegó el momento de revelar su verdadera identidad, Angel se sorprendió, sin comprender muy bien lo que estaba sucediendo, pero agradeciendo la confianza que depositaron en ella. Para retribuirle su esfuerzo, su jefe le regaló un cheque de 250 mil dólares, suficiente para que comprara una casa para ella y sus hijos.
Angel se sintió tan feliz y nerviosa que perdió el equilibrio por un momento. Ahora ella y sus hijos tendrían un lugar digno donde vivir. Esto nos demuestra que, tarde o temprano, todo esfuerzo tiene su recompensa.
