El 11 de enero, Megan Fox y Machine Gun Kelly generaron un gran revuelo en las redes sociales al anunciar su compromiso, tras año y medio de relación. El anuncio se realizó en la cuenta de Instagram de la actriz, donde compartieron un video del emotivo momento, que rápidamente recibió numerosas felicitaciones y buenos deseos.
Una de las cosas que más sorprendió a sus seguidores fue el anillo que el músico le dio a Megan. Este fue diseñado especialmente para ella, incorporando un diamante y una esmeralda, las piedras de nacimiento de cada uno. Recientemente, el rapero reveló que el distinguido anillo en realidad posee un oscuro secreto.
“El amor duele”
Machine Gun Kelly mencionó en una entrevista con la revista Vogue que el anillo está diseñado para dividirse en dos anillos separados, conectados por un imán. Aunque esta información no es nueva, ya que la había compartido en Instagram, lo que realmente sorprendió a sus seguidores fue que el anillo puede causar dolor a Megan, ya que el músico afirmó que la banda tiene espinas.
[Sobre las gemas del anillo de Megan] Se trata de una esmeralda pura de Colombia, sin ningún tratamiento. Proviene de la mina y fue tallada en forma de gota. El diamante fue creado directamente por Stephen [Webster, el reconocido joyero que diseñó el anillo]. La idea es que el anillo se puede separar en dos, y cuando están juntos, se unen por un imán. ¿Ves cómo se conectan? Juntos forman un corazón oscuro. De hecho, las bandas tienen espinas. Por lo tanto, si intenta quitárselo, duele. ¡El amor duele!
No es la primera vez que comparten declaraciones intensas sobre el amor que se profesan. De hecho, Machine Gun Kelly solía llevar un dije que contenía sangre de Megan, y la actriz insinuó que, tras su compromiso, “bebieron la sangre del otro”. Aunque probablemente era una broma, refleja la naturaleza particular de sus declaraciones, que, junto con su estilo inconfundible, los ha mantenido en el centro de atención.
Su relación no es la típica de Hollywood, pero está claro que ambos se aman profundamente, tal vez demasiado, y solo queda desearles una relación muy larga y feliz.
