En la actualidad, mantener una relación amorosa puede ser bastante complicado, ya que la infidelidad, los celos y las mentiras son solo algunas de las razones por las que muchas personas sufren y se desilusionan del amor. Esto les lleva a preferir la soltería y a no abrir su corazón a nadie más.
No obstante, parece que esos motivos no son la razón por la que este hombre se mantiene soltero. Él sostiene que su problema es que es demasiado atractivo y perfecto para las mujeres, lo que lo convierte en alguien inalcanzable para ellas.
El protagonista de esta historia viral es Callum Flanagan, un profesor de matemáticas de 32 años de Windsor, Inglaterra, quien afirma llevar seis años sin una pareja. Atribuye su soltería a su atractiva apariencia, que interfiere en las citas que consigue a través de Tinder.
«Mi apariencia a menudo se impone en las citas. Me preguntan con frecuencia si soy real; puede sonar algo arrogante, pero creo que refleja lo que muchas mujeres esperan de los hombres hoy en día.»
Flanagan dijo que, durante sus citas, las mujeres a menudo se sorprenden y tienden a pensar que les está mintiendo, ya que les parece impensable que, además de ser atractivo y estar bien presentado, posea un buen trabajo, confianza en sí mismo y respeto, lo que les lleva a pensar que es un chico ideal.
Consciente de que conocer a las mujeres en persona es mucho mejor, el hombre mencionó que comenzó a usar la aplicación de citas debido a sus largas horas de trabajo. Aunque su apariencia no es el único aspecto que genera controversia, también ha mencionado que es común que algunas mujeres piensen que roba fotos de otros hombres y se hace pasar por ellos, aunque asegura que su perfil es absolutamente auténtico.
«La gente dice ‘Eres muy guapo, demasiado bueno para ser verdad’ o preguntan ‘¿Eres real?’. La aplicación solo permite expresar una parte de tu personalidad; no hay profundidad. Tengo muchas fotos, pero ninguna biografía, lo que imagino resulta desconcertante para las mujeres. Deben pensar que soy falso.»
La relación más prolongada que Flanagan ha tenido duró seis meses. Aunque algunas amigas intentaron organizarle citas a ciegas, se dio cuenta de que esa modalidad no era para él y decidió unirse a aplicaciones de citas, donde aún alberga la esperanza de encontrar el amor.
Durante las citas, las mujeres le preguntan si su soltería se debe a que es muy exigente o quisquilloso, a lo que él responde que no. Si bien se respeta a sí mismo, decide tomar las cosas con calma.
«Antes me frustraba con las aplicaciones, pero ahora comprendo que reflejan un mundo en evolución. Hacemos transacciones bancarias en línea, compramos en línea, ¿por qué no podríamos tener citas en línea también?»
Ante las críticas que ha recibido sobre su aparente arrogancia y narcisismo respecto a su físico, aseguró que seguirá compartiendo sus fotos en el gimnasio y sin camiseta en la playa, ya que para él es esencial sentirse y verse bien.
Flanagan considera importante mostrar que se cuida, pues su profesión lo asocia con alguien de mayor edad, miserable, aburrido e incluso descuidado, ya que los profesores suelen trabajar muchas horas.
No afirmo que haya un estigma, pero puede resultar un poco desconcertante cuando les digo a las mujeres que soy profesor de matemáticas. No siempre saben cómo reaccionar. Combinado con mi apariencia, muchos piensan que algo no cuadra.